Por mucho que
Samsung nos advirtiera que la actualización a Android 2.3 del
Galaxy S se dejaría caer
a mediados de abril, no pensábamos que se lo fuera a tomar tan al pie de la letra (ya sabes cómo son
estas cosas). Por suerte, han cumplido su palabra y tal como nos prometieron, desde la pasada madrugada están repartiendo raciones recién horneadas de
Gingerbread entre algunos propietarios de su famoso terminal. Según parece se trata de una maniobra por fases, ya que por el momento la esperada galleta está llegando a los terminales de los países nórdicos, Holanda y Alemania; aunque dada la gran expectación, no dudamos que la compañía coreana pronto invitará a la fiesta al resto de usuarios europeos. ¿Y a ti, se te hace la boca agua al olor del jengibre?
Fuente: http://es.engadget.com