Para no tirar la piedra y esconder la mano, empiezo yo :P
En mi caso tengo de todo un poco, desde sensaciones positivas porque publiqué mis primeras apps en iOS que me sirvió para aprender Swift, SpriteKit y conocer el ecosistema. Cada vez es más difícil tener visibilidad en la store sin dejarte los cuartos en publicidad, y para no hacerlo me sorprende que de vez en cuando alguien compre la app.
En Android mejoré sustancialmente una de mis apps y... cayó en el ranking de la tienda. ¡Inédito! Creo que al dicho de "si algo funciona no lo toques" hay que añadirle "y si no funciona tampoco". Hay que reconocer que aprendí bastante de ese episodio, incluido el que vivir de tus propias apps a veces es una lotería porque el grifo puede cerrarse de un momento a otro "porque sí".
Tenía como propósitos de fin de año sacar un par de juegos navideños sencillos y, bueno, visto que estamos a 7 de diciembre... le estoy viendo los cuernos a los renos de Papá Noel ya

. Me puse a hacerlos con Kotlin y LibGDX, buen combo que no había probado hasta el momento. Precisamente porque no había trabajado con ellos estoy tardando más de lo planeado. Nuevamente, mucho aprendizaje, pero la idea era monetizar aprovechando la temporada navideña. Habrá que tirar al "minimum viable product" o no llega a tiempo jaja
Por lo demás, una reflexión de este año: cada vez es más complicado monetizar una app sin vender tu alma al diablo, léase poniendo anuncios estafa que suscriben al usuario a servicios de pago o llenándole el dispositivo de porquería o espiándole continuamente y compartiendo su teléfono y su localización. Eso unido a que los rankings funcionan como quieren quita bastante motivación al tema de desarrollar apps directamente para la Play Store (en plan desarrollador independiente, esto es).