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¿Un influencer de verdad? Ahora puedes comprar uno creado por IA
¿Un influencer de verdad? Ahora puedes comprar uno creado por IA ![]() La irrupción de cuentas creadas por IA ha dado paso a una nueva industria: los influencers sintéticos. Startups como Doublespeed ofrecen ya un servicio integral que va más allá de generar contenido automático: diseñan identidades, crean publicaciones y gestionan redes a gran escala para clientes que buscan amplificar mensajes sin pagar a personas reales. Estas “granjas de influencers” combinan contenidos generados por IA con infraestructuras tecnológicas (granjas de móviles, cuentas con historial previo) para sortear los filtros y parecer auténticas ante los algoritmos. El modelo de negocio es sencillo y rentable: Doublespeed vende packs por miles de dólares que prometen alcance masivo y resultados medibles, con casos que alcanzan millones de visualizaciones en pocas semanas. Además, emplean tácticas para simular comportamiento humano y reducir el riesgo de detección, aprovechando cuentas con interacciones previas y dispositivos repartidos geográficamente. El problema es ético y normativo. Estas prácticas rozan o violan las normas de plataformas como Meta sobre representaciones engañosas de identidad, y al mismo tiempo elevan el fenómeno del astroturfing a un nuevo nivel: no solo se fabrica una opinión, sino una personalidad que la difunde. La inversión de fondos de capital riesgo de primer orden añade una dimensión inquietante: la profesionalización del engaño digital. Con la mayor parte del tráfico en la red ya no siendo humano y la llegada masiva de contenidos IA, el debate se intensifica: ¿están las plataformas y la regulación preparadas para frenar una industria que convierte la falsedad en servicio?. fuente |
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#2
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¿Un influencer de verdad? Ahora puedes comprar uno creado por IA ![]() La irrupción de cuentas creadas por IA ha dado paso a una nueva industria: los influencers sintéticos. Startups como Doublespeed ofrecen ya un servicio integral que va más allá de generar contenido automático: diseñan identidades, crean publicaciones y gestionan redes a gran escala para clientes que buscan amplificar mensajes sin pagar a personas reales. Estas “granjas de influencers” combinan contenidos generados por IA con infraestructuras tecnológicas (granjas de móviles, cuentas con historial previo) para sortear los filtros y parecer auténticas ante los algoritmos. El modelo de negocio es sencillo y rentable: Doublespeed vende packs por miles de dólares que prometen alcance masivo y resultados medibles, con casos que alcanzan millones de visualizaciones en pocas semanas. Además, emplean tácticas para simular comportamiento humano y reducir el riesgo de detección, aprovechando cuentas con interacciones previas y dispositivos repartidos geográficamente. El problema es ético y normativo. Estas prácticas rozan o violan las normas de plataformas como Meta sobre representaciones engañosas de identidad, y al mismo tiempo elevan el fenómeno del astroturfing a un nuevo nivel: no solo se fabrica una opinión, sino una personalidad que la difunde. La inversión de fondos de capital riesgo de primer orden añade una dimensión inquietante: la profesionalización del engaño digital. Con la mayor parte del tráfico en la red ya no siendo humano y la llegada masiva de contenidos IA, el debate se intensifica: ¿están las plataformas y la regulación preparadas para frenar una industria que convierte la falsedad en servicio?. fuente ![]() ![]() ![]() ![]() ![]() ![]() Saludos y buenos días, compañeros.
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Samsung GALAXY A55, Samsung GALAXY WATCH ULTRA, Amazfit BALANCE 2.
A los administradores no es gusta las críticas hacia ellos. |
| Gracias de parte de: | ||
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#4
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Ya no sé cual puede ser peor.
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