Hace tiempo tuvimos casi la misma historia pero con Sony cuando el Z3 recuerdo, desde entonces la marca ya no anuncia sus teléfonos como resistentes al agua, simplemente en las especificaciones te pone que tiene IPXX y punto. Ahora salta lo mismo con Apple, aunque Samsung hace lo mismo, pero es lo mismo.
La historia es que mucha gente también confunde el término "resistente al agua" con "sumergible", y además ni siquiera se fija en que el número de la certificación IP que lleva cada teléfono significa un tipo de resistencia u otra, y a veces la diferencia puede ser clave.
Por un lado, de cara al consumidor, parece una broma macabra que el fabricante certifique una resistencia pero luego no la cubra la garantía si falla, como si no se fiara de esa certificación. Pero también hay que tener en cuenta que la certificación no es eterna, el tiempo y las condiciones de temperatura hacen que las gomas y protecciones para la estanquidad se deterioren y al final puedan permitir cierta entrada de agua al interior, por lo que la empresa tampoco quiere pillarse los dedos al ofrecer la garantía para no tener que perder mucho dinero.
Al final es lo de siempre, las empresas sólo buscan el beneficio, y si pueden reducir costes por mínimos que sean cambiando tal o cual cosa en las garantías o en cualquier política de cara al consumidor, lo harán mientras sea legal.