En mi caso, poseo la variante MEG7 del Redmi 5 Plus Global (4/64), el cual la actualización a Android Oreo le ha caído como anillo al dedo. La autonomía ha vuelto a la normalidad tras cargar el teléfono apagado desde cero hasta el 100%, y hasta las aplicaciones que normalmente uso (Facebook, Twitter, WhatsApp, Instagram) tienen una fluidez mayor en contraste cuando estaban en Nougat.
Y otra cosa, el autoenfoque de la cámara ahora sí es rápido.