Está muy bien eso de tener un zoom 100x (que solo se va a usar una vez, por la mierda de imagen que capta), o grabar en 8K (aunque luego no puedas ver lo maravilloso, o no, del vídeo por no tener una TV o monitor capaz de mostrar esa resolución)
Lo malo es el aumento espectacular, a la vez que absurdo, que supone tener esas dos funciones totalmente prescindibles.
Pero, claro, si es mas caro, es mejor.