La estrecha línea que separa la necesidad del capricho.
Las dudosas justificaciones por probar algo mejor cuando lo que se tiene es más que suficiente.
Y lo más triste, dar imagen, aparentar con un terminal carísimo que apenas se usa para lo básico, llamar, WhatsApp, música, web o algún jueguecito de moda.
C O N S U M O.
Luego está el común de los mortales (la gran mayoría) que piensan "si el móvil tira, hasta que se caiga a pedazos"