Los
halos no son unos seres endiablados
que aterrorizan a los fotógrafos. En realidad son fenómenos que bien controlados, pueden ofrecer un toque distinto a tus fotografías. Reconozco que lo he intentado en alguna ocasión pero con resultados inesperados, al principio sobre todo. Como siempre todos tenemos algo pendiente que aprender y tenemos nuestros puntos débiles.
Este
fenómeno junto a los flares se suele dar cuando el haz de una fuente de luz resulta ser muy intenso y entra directamente hacia la cámara. Hay quien lo odia profundamente y hay quien le encanta.
Si estuviéramos en exterior nos podría ocurrir cuándo tenemos el sol de frente, por ejemplo. Por esa razón nos solemos mover un poquito para que el ángulo de incidencia de la luz sea "más manejable"