Leches, me has hecho recordar cuando tuve un Acer 200 en aquellos tiempos nuevecito y a la semana hizo un salto de altura de medio metro (la bolsa-mochila se me quedó abierta y al ponerla a la espalda el portátil se escapó por la ranura) y ala, a tomar pol saco el ordenador. Funcionaba, sí, pero la pantalla quedó hecha añicos, y la reparación en esos momentos suponía casi el coste del portátil así que ajo y agua (a joderse y a aguantarse)...
Celebro no le haya pasado nada!