Y pensaba yo que aquella mañana en la que me desperté al lado de Tom Cruise en el yate que me compre con el euromillon que me tocó la semana anterior después de que mi Fiat panda fuese siniestro total y saliera ilesa era un acontecimiento que nunca podría ser superado o ni tan siquiera igualado por otro ser humano, cuan equivocada estaba!!
