Yo entiendo que a nivel de hardware es cada vez más difícil rascar mejoras. Entre que la tecnología no evoluciona tan rápido de un año para otro y que no pueden sacar un top porque el teléfono del año siguiente no tendría sentido (y esto último ya está pasando...) creo que comienza a no tener sentido sacar un teléfono nuevo cada año.
El otro asunto es a nivel de software. Sinceramente, creo que no les sale de los dedos (por no decir de otro lugar) poner a disposición de una buena cantidad de dispositivos antiguos las nuevas versiones. ¿De veras cuesta tanto adaptar Android a un S23 o un S24?
Esto siempre se compara con Apple y siempre se dice lo mismo: Apple controla el software y el hardware. Correcto. Samsung solo controla el hardware al 100% y obtiene una base del sistema operativo que debe adaptar. Correcto. ¿Pero de veras es tan complicado? ¿De veras es tan complicado adaptar unos controladores específicos de cada dispositivo, revisar que funcione y listo?
Como dice Jorge los argumentos que expone ahora Samsung (y no son nuevos...) huelen a cuerno quemado. Hacen buenos cacharros pero muchas veces, quizás demasiadas, nos hemos quedado con promesas incumplidas. Funciones que iban a llegar y nunca llegaron. En este caso hablo sobretodo de los relojes de Samsung (todavía recuerdo cuando tenía que llegar el medidor de oxígeno al Active 2 pero claro, presentaron el Watch 3 que ya lo llevaba de fábrica) pero seguro que en algún modelo había alguna promesa de que llegaba una función y luego nada.
A todo esto, tengo un S24+ del cual estoy muy contento. Y me molesta que retrasen sinedie OneUI 7 pero igualmente, el teléfono funciona cojonudo. Otra vez, promesas incumplidas o si más no rediseñadas. Ahora que si otra beta, que veremos como va... no espero actualización hasta abril.