Llevo desde el sábado con Windows 11 instalado en un portátil comprado en 2010 (procesador
i3-350M) sin TPM ni Secure Boot, aunque sí con UEFI, y perfecto. Únicamente tuve que instalar desde cero, porque el instalador no deja actualizar si no cumples con los requisitos y no hay modo de saltarse la comprobación. Va perfecto, me ha saltado la última actualización de seguridad sin problemas y no va peor que Windows 10. Prueba superada.