Lo que realmente aporta es tener una apertura 1.5, que permite recoger gran cantidad de luz, sobre todo en condiciones de baja luminosidad. La 2.4 se supone que entra en funcionamiento en condiciones de muy buena luminosidad, ya que en teoría, una gran apertura conlleva también el problema de una posible perdida de profundidad de campo. Algo que se aprecia y se maneja con cámaras profesionales que tienen unos sensores mucho más grandes que los de un smartphone. En automático, en más de 90% de las fotos, el terminal escogerá la 1.5. Y como demuestran en el artículo, en manual, y llevando la situación al extremo, no existen diferencias mínimamente apreciables entre una apertura 1.5 o 2.4.
Lo siento compañero, pero la apertura variable NO aporta nada (en un smartphone.)