A mí me gusta todo del terminal. Con las últimas actualizaciones que tampoco son bárbaras en novedades, la batería no ha empeorado que no es poco, es más, ha mejorado en reposo. Cumple magníficamente bien en todos los aspectos y no le falta ninguna cosa que no pueda tener un móvil. Podemos querer más pantalla, más batería, mejor de esto o de lo otro, pero es casi perfecto tanto en diseño sobre todo porque me encanta como en las demás funciones que desempeña. Es más, para mí gusto el Honor 8 pro redondea al Honor 8 pero es que esas 15 láminas de cristal traseras de las que podría llegar a prescindir, pues molan muchísimo en su diseño y tacto.