Los primeros días alucinas al ver la pedazo pantalla y las 4 chorradas que trae.
Luego te desesperas por los parones que tiene, y si usas el gps querrás buscar un puente para tirarte (pero no será el móvil quien te guíe hasta el puente).
El resto del tiempo lo pasarás probando distintas roms, hasta que veas que ninguna funciona bien todavía, y a partir de ahí pues depende de tu ímpetu, puedes tirar el móvil por la ventana o tener paciencia y esperar con ilusión esa rom que nunca llega.