Un revés importante para Samsung, puesto que la cámara era una de esas características que había mejorado respecto al S4. Si esta acaba jodiéndose por un fallo de fábrica, lo que debieran hacer es ofrecer garantía a perpetuidad y cambiar dicho terminal por otro completamente nuevo.
Hoy en día los usuarios pagan un sobrecoste por estos terminales como para que fallen calamitosamente a los pocos días de ser adquiridos.
Esperemos que este fallo pueda ser aprovechado adecuadamente por otras marcas como LG y Sony, quienes llevan haciendo muy buenos productos últimamente, y la competencia se presente más dura.
No sólo de Galaxys puede vivir el hombre.
