Los dos son castañas pilongas en términos de especificaciones, pero el LG tiene un diseño más elegante y tiene ICS oficial. Lo de la memoria también es un buen punto en favor del L5 que se nota en la vida diaria. Yo de ti lo cambiaría con los ojos cerrados.
El principal defecto que tienen los LG solía ser el software pésimo que montaban, pero han ido mejorando claramente desde las épocas de terror del Optimus 3D y el 2x. Tras varios teléfonos con buenas críticas (el 4X, el G y G Pro) y un par de bombazos de ventas (la serie L) ya son una marca respetable que se puede coger con confianza.