HTC sigue por el mismo sendero de "éxito" que tuvo el año pasado. Misma fórmula, mismo fracaso habrá (o mayor).
Todo lo que vendrá a offrecer, la marca taiwanesa, estará de la mano, ¿cómo no?, de su diseño. Eso no bastó en su anterior modelo para vender lo necesario como para salir de la crisis inmersa en la que está la empresa.
Todo el mundo sabe y está esperando al Samsung Galaxy S5 por ser el terminal que abrirá a veda y marcará el camino a seguir por los próximos modelos top en sucesivos meses.
Quizás este HTC M8 u One 2 vuelva a conseguir el título de mejor terminal del año. ¿Quién sabe? Quiéreme menos y cómprame más, pensarán los consejeros de la marca taiwanesa.